El distanciamiento social ya se ha convertido en una práctica rutinaria para la prevención contra COVID-19, una enfermedad causada por el nuevo coronavirus (SARS-CoV-2). Miles de personas, infectadas o no, permanecen en cuarentena en todo el mundo, evitando el contacto cercano con otras personas.
Cuando se confirma la contaminación de alguien, la primera orden dada por los expertos es que se aíslan durante un período de al menos 14 días. Por lo general, la hospitalización en hospitales solo se realiza en pacientes que presentan síntomas graves, como dificultad para respirar, por ejemplo.
Sin embargo, la práctica del aislamiento social puede convertirse en un desafío para aquellos que viven en grupos. Entender cómo debe ser vivir con una persona infectada con el nuevo coronavirus y qué cuidado se necesita para evitar el contagio de otros residentes.
Confirmación del examen
Si una persona sospecha que ha sido infectada, el primer paso indicado es que se aísla de los demás hasta la confirmación de la prueba COVID-19 o la mejora de los síntomas. Si se ha demostrado que la infección ha ocurrido, debe permanecer aislada durante otros 14 días.
Habitación separada
Una habitación aislada y cuarto de baño propio. Es ideal que una persona infectada se quede en una habitación separada de los otros residentes, con buena ventilación en el lugar, y evitando moverse por la casa.
Uso de máscararillas
Cuando el residente infectado necesita ir a otra habitación, se recomienda utilizar máscaras para evitar que las gotas respiratorias se propaguen por el medio ambiente, evitando la contaminación de otros residentes.
Higiene de las manos
Antes de salir del lugar de aislamiento, la persona infectada debe desinfectar las manos con agua y jabón o alcohol 70%. Los demás residentes de la casa también deben mantener sus manos limpias al entrar y salir de los lugares de convivencia con una persona contaminada.
Entornos de desinfección
Cada lugar tocado por el paciente infectado, como un fregadero, un inodoro, deben limpiarse y desinfectarse. «La habitación del residente también debe tener una desinfección con algún producto de limpieza, alcohol del 70%, lejia, una o dos veces al día, especialmente en lugares de contacto como cama, ordenadores, armario, pomo de la puerta”.
Materiales de limpieza
Además del alcohol en gel, materiales como el antiséptico, el cloro y la lejía también son opciones para desinfectar los ambientes. Además, la persona que va a hacer la limpieza debe hacer uso de máscara y guante desechable.
Artículos del hogar
Si es posible, lo recomendado es que la persona infectada tenga sus propios cubiertos, vasos y platos, evitando compartir estos objetos con los demás residentes de la casa. Stephen explica que después de su uso, estos utensilios se pueden desinfectar normalmente con agua o jabón.
Ropa
La ropa de cama y la ropa de cama de una persona infectada con COVID-19 deben colocarse en una bolsa de plástico y lavarse por separado, preferiblemente con una mezcla de agua, jabón y desinfectante líquido. El uso de máscaras y la higiene de las manos también se indica al realizar esta tarea.
Mejora de los síntomas
Según los expertos médicos, después de 14 días de cuarentena, si la persona infectada o sospechosa no presenta más síntomas, puede volver a participar normalmente en actividades en el hogar, manteniendo hábitos de higiene recomendados por el Ministerio de Salud, como lavarse las manos con agua y jabón y usar máscaras cuando hay necesidad de salir de la casa.